MIME-Version: 1.0 Content-Type: multipart/related; boundary="----=_NextPart_01D508E8.8EECB4D0" Este documento es una página web de un solo archivo, también conocido como "archivo de almacenamiento web". Si está viendo este mensaje, su explorador o editor no admite archivos de almacenamiento web. Descargue un explorador que admita este tipo de archivos. ------=_NextPart_01D508E8.8EECB4D0 Content-Location: file:///C:/507D31F1/44Articulo_Edwin1.htm Content-Transfer-Encoding: quoted-printable Content-Type: text/html; charset="windows-1252"
Amaurosis fleeting du=
e to
ophthalmic carotid artery aneurysm. About
a case.
Edwin
Javier Correa Vivanco.[1], =
Juan
Alberto Luzuriaga Luzuriaga.[2] &=
amp; Karla Pilar =
Garces
Granoble.[3] <=
/span>
Recibido: 28-02-2019 / Revisado: 28-0=
2-2019
/Aceptado: 26-03-2019/ Publicado: 05-04-2019
The aneurimas are vascular
injuries that today are well known, but hospital care can be pre confused by
tensional or migraine headaches even if it comes accompanied by visual
disturbances. Aneurysms in the ophthalmic artery are very rare lesions, but
because of their location they can endanger the life of the patient who suf=
fers
from it since its origin has anatomical relationships with the adjacent opt=
ic
nerves and bony structures of the cranial base and the The cavernous sinus,=
as
well as the difficulties that can occur to clip the neck of these aneurysms,
preserving the integrity of the mother artery, give rise to very special
technical complexities during the surgical treatment. The following is the =
case
of a 58-year-old female sex patient referred from a hospital in Portoviejo =
with
a clinical picture of high-intensity holocranial headache, in addition to
vertigo and left amaurosis fugax.
Keywords: Amaurosis
Fleeting, Ophthalmic Carotid Aneurysm, Embolization.
=
span>
Los aneurimas son lesiones vasculares que en la
actualidad son muy conocidos, pero en atenciones pre hospitalarias pueden s=
er
confundido por cefaleas tensionales o migrañosas incluso si viene acompañad=
os
de alteraciones visuales. Los aneurisma en la arteria oftalmicas son lesion=
es
muy poco comunes, pero por su ubicación pueden poner en peligro la vida del
paciente que lo padece ya que su origen del mismo presentan relaciones
anatomicas con los nervios ópticos adyacentes y estructuras óseas de la base
craneal y el seno cavernoso, así como las dificultades que se pueden presen=
tar
para clipar el cuello de estos aneurismas, preservando la integridad de la
arteria madre, dan origen a complejidades técnicas muy especiales durante el
tratamiento quirúrgico. A continuacion se trata del caso de una paciente de=
58
años de sexo femenino referido de un hospital de portoviejo con cuadro clin=
ico
de cefalea de gran intensidad holocraneana con ademas de vertigo ademas de
amaurosis fugaz izquierda.
Palabras clave=
:
Amaurosis Fugaz, Aneurisma Carotida Oftalmico, Embolización.
Introducción.
Son varias las causas=
de
aneurismas intracerebrales al igual que su ubicación, se presentan cerca de=
l 5
% en la población adulta, de estos el 85% en la región anterior y un 20 % s=
on
bilaterales y ahí radica la importancia de realizar angiografías bilaterale=
s
Caso
clínico
Paciente de 58 años de
edad de sexo femenino con antecedentes patológicos personales de hipertensi=
ón
arterial mal controlado, que acude a el hospital general de Babahoyo con cuadro clínico 11 días de =
evolución
con cefalea holocraneana de gran intensidad 8/1=
0 sin irradiación,
que se acompaña con vértigo y amau=
rosis
fugaz no progresivo de ojo izquierdo, al examen físico esta alerta, orienta=
da,
con glasgow 15 / 15, sin fiscalidad neurológica,
examen oftalmológico normal, con signos vitales 132/65, la cual realizan RMN el cual revelo ane=
urisma
de arteria oftálmica de base implica con medición de 12 mm de longitud por =
9 mm
de anchura dependiente del segmento sacular de arteria carótida interna
izquierda sin visualización de sangrados intraparenquimatosos ni subaracnoides. por lo que deciden derivarla a una ins=
titución
para tratamiento definitivo por su capacidad limitada. Llegada a la institu=
ción
privada el cual se realiza angiotomografia cerebral el cual no se observa
sangrado intraparenquimatosos ni subaracnoides, las imágenes de reconstrucc=
ión
3D muestra lo siguiente: Formación aneurismática grande de base amplia (sin
cuello) de aspecto sacular que mide 12 mm de longitud por 9 mm de anchura
dependiente de segmento supracelar de arteria carótida interna izquierda tal
como lo indica el gráfico 1. se realiza exámenes de biometría hemática y fu=
nción
renal normal, por lo que se decide realización de arteriografía cerebral el
cual revela aneurisma sacular grande de 15.1mm de longitud por 8.75 mm de a=
ncho
con base no ancha (cuello) se realiza embolización de aneurisma carótida
oftálmico con 18 coil, tal como lo indica el gráfico 2. Pasa a unidad de
cuidados intensivos despierta, orientada, con cefalea de gran intensidad,
glasgow 15/15, con signos vitales de 135 / 98 sin complicaciones neurológica
con diuresis conservada, se da indicaciones de analgesia, antiagregación
plaquetaria doble y antihipertensivos.
Posteriormente paciente es pasada a unidad de cuidados intermedios el
cual evoluciona favorablemente y es dada de alta con indicaciones medicas c=
on
posteriores controles por el área de consulta externa de hospital que fue
refirió.
Discusión
La mayoría de los síndromes que compromete de la
visión son causados por tumores pituitarios, meningismos, supracelares y
craneofaringiomas
Otros autores señalan que los aneurismas de la reg=
ión
de la arteria oftálmica pueden ser bilaterales o gemelos en el 20 al 47% de=
los
aneurismas múltiples.
Los aneurismas s=
aculares
no sólo provocan HSA si=
no también síntomas
y signos por compresión <=
span
style=3D'letter-spacing:.1pt'>directa, tanto
de las vías ópticas, en específico el nervio óptico por dilataciones
de la carót ida supraclin=
oidea
o de la arteria oftálmica, como de los nervios
oculomotores, por dilataciones d=
e la arteria caro t ídea
in t racavernosa. Dichos déficit
neurológicos pueden adoptar un perfil agudo, cró=
nico o
fluctuante cuyos síntomas dependen
de la localización de la lesión vascular
y de las relaciones de =
ésta
con las vías visuales
Los signos compresivos son frecuentes principalmente sobre los pares craneales III, IV, VI y más
tarde la primera y segunda división del V par.
Los aneurismas masivos<=
span
style=3D'letter-spacing:-.6pt'> pueden incluso
erosionar el piso de la fosa media
o desplazarse hacia
La resonancia magnética es el método de elección
cuando se sospecha una lesión compresiva de las vías visuales, especialmente
alrededor del quiasma óptico; es particularmente útil en las lesiones mayor=
es
de 3 mm así como en las lesiones vasculares que =
no
pueden ser visualizadas por angiografía.
Sin embargo, la TAC es el método adecuado para el
diagnóstico de hemorragias subaracnoideas por la ruptura de aneurismas, las
cuales pueden pasar por alto con la RM. La técnica de angiografía puede
diagnosticar aneurismas entre 2 y 3 mm y es el método que produce mejores
imágenes y su vez se puede realizar el tratamiento definitivo con implante =
de
coils.
Gráfico : Angiotomografia=
de vasos cerebrales que revela aneurisma de asp=
ecto
sacular que mide 12 mm de longitud por 9 mm de anchura dependiente de segme=
nto supracelar de arteria carotida=
span>
interna izquierda
Fuente: Edwin Javier Correa Vivanco
Gráfico 2: Arteriografia cerebral que revelo aneurisma sacular grande de
15.1mm de longitud por 8.75 mm de ancho con base no ancha (cuello). Además muestra embolización con colocación de 18 coils
Fu=
ente: Edwin Javier Correa Vivanco=
span>
Conclusión
· =
La idea
fundamental es que todos seamos conscientes de los síntomas iniciales de la
enfermedad para su rápido diagnóstico y tratamiento adecuado, evitando secu=
elas
neurológicas que incapacitan la actividad física y además las actividades
comunes de la persona. En nuestro caso el rápido tratamiento y diagnostico
oportuno se evitó que el cuadro progrese a ruptura de aneurisma que por su
ubicación pudo haber comprometido la vida del paciente.
Referencias
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Glaser.
PARA
CITAR EL ARTÍCULO INDEXADO.
=
Sánchez E., Castillo =
E., Bravo V., Abarca E. & Montufar E.
El artículo que se publica es de
exclusiva responsabilidad de los autores y no necesariamente reflejan el
pensamiento de la Revista Ciencia
Digital.
El artículo qu=
eda
en propiedad de la revista y, por tanto, su publicación parcial y/o total en
otro medio tiene que ser autorizado por el director de la Revista Ciencia Digital.
[1]=
Clínica Guayaquil, Guayaquil Ecuador,
edcorreavivanco85@hotmail.com
=
[2] Clínica Guayaquil, Guayaquil Ecuador,
jaluzu@hotmail.com
[3] Clínica Guayaquil, Guayaquil Ecuador, =
karlagarcesmd@hotmail.com
www.cienciadigital.org
=
Vol.
3, N°2, p. 668-675, abril - junio, 201