MIME-Version: 1.0 Content-Type: multipart/related; boundary="----=_NextPart_01D609E1.767C7D90" Este documento es una página web de un solo archivo, también conocido como "archivo de almacenamiento web". Si está viendo este mensaje, su explorador o editor no admite archivos de almacenamiento web. Descargue un explorador que admita este tipo de archivos. ------=_NextPart_01D609E1.767C7D90 Content-Location: file:///C:/8D2338D2/Vol11-2.htm Content-Transfer-Encoding: quoted-printable Content-Type: text/html; charset="windows-1252"
Reflections on the=
prevalence
of essential hypertension and the effects of physical exercise for prophyla=
ctic
and therapeutic purposes
Msc.
Eugenio González Pérez [1]=
span>,
Drc. Carlos Manuel Fuent=
es [2] & Drc.=
Luis
Lázaro Arias Rodríguez[3]
Recib=
ido:
08-01-2018 / Revisado: 09-02-2018 / Aceptado: 10-03-2018 / Publicado:
05-04-2018
Abstract. Keywords:
tests, thera=
peutic,
habits, lack, blood pressure. |
|
Resumen. Palabras
claves: pruebas, terapéutico, hábitos, carencia, tensión
arterial. |
Introducción.
El tr=
atamiento
de las enfermedades no transmisibles es unos de los problemas que más preocupan a las
instituciones de salud y entre ellas, tiene un lugar cimero las enfermedades
cardiovasculares, las cuales cobran miles de vidas anualmente, por lo que l=
a estimación
de los riesgos y las medidas que se pueden tomar son importantes en el cont=
rol
de estas. Mientras más tiempo permanezcan estas sin tratamiento alguno, may=
or
será el impacto sobre el organismo, que como agravante tiene que no surgen
aisladamente, sino que constituyen “causa y efecto” entre sí, por lo que un
individuo que padezca alguna, debe evaluarse con sumo cuidado para determin=
ar
la presencia de otros agentes agravantes de su salud.
Desarrollo
Dentro de los síntomas y enfermedades cardiovasculares, la hipertensión se ha denominado sabiamente = el "asesino silencioso", porque no produce generalmente síntoma ning= uno. Es importante, por lo tanto, para cualquier persona con factores de riesgo a padecer enfermedades cardiovasculares, hacerse chequear la tensión arterial= con regularidad y proponerse la realización de cambios, adoptando estilos de vi= da apropiados. Tales recomendaciones son válidas para los individuos que tiene= n en general tensión arterial alta (inclusive la hipertensió= n que se consideran, clínicamente,= como normal alta), antecedentes familia= res de hipertensión, sufren de sobrepeso o son mayores de cuarenta años de edad. La hipertensión no tratada aumenta lentamente con el transcurso de los años, en casos raros (menos de un por ciento de los pacientes hipertensos), la tensi= ón arterial asciende rápidamente, dando lugar a hipertensión maligna o acelera= da. No obstante sea cual sea su carácter, esta es una enfermedad potencialmente mortal y debe tratarse de inmediato.
Dentro de los síntomas fundamentales que produ= ce la hipertensión arterial se pueden contar: somnolencia, confusión, do= lor de cabeza, náusea y visión borrosa y otros que se presentan con menos frecuenc= ia. Recomendamos a los individuos hipertensos que deberán acudir al médico de inmediato si aparecen estos síntomas con frecuencia (5).
Para realizar la medición = de la tensión arterial sistémica, que es la fuerza ejercida por la sangre contra = las paredes de los vasos sanguíneos, se utiliza el estetoscopio y el esfigmomanómetro, la que a pesar de ser indirecta ofrece datos confiables d= el comportamiento de esta. La medición tensión arterial tiene dos componentes:=
- La te= nsión arterial sistólica, que mide la presión que ejerce la sangre sobre las arte= rias en fase de contracción del corazón (sístole) cuando es impulsada hacia los tejidos periféricos.
- La te= nsión arterial diastólica que mide la presión que ejerce la sangre sobre las pare= des de las venas cuando el corazón se relaja (diástole) para permitir su entrad= a a la aurícula derecha (4).
La determinación de la tensión arterial en reposo es un componente básico de la evaluación previa del sujeto, tanto cuando asiste a consulta, como al somet= erse a los programas de rehabilitación, ya sea por medio del ejercicio u otros métodos. Las decisiones deben que fundarse en la media obtenida de dos o más mediciones de la tensión arterial. Esta se considera como riesgo cardiovasc= ular cuando la tensión arterial sistólica es mayor a 140 mm Hg. y la tensión arterial diastólica es mayor a 90 mm Hg. A continuación, exponemos la clasificación del Comité conjunto de Detección, Evalu= ación y tratamiento de la tensión arterial para personas que no toman medicamentos antihipertensivos, no tienen enfermedades asociadas y son adultos mayores d= e 18 años (3).
TA Sistóli=
ca |
TA Diastól=
ica |
Clasificac=
ión |
< 130 |
<85 |
Normal |
130-139 |
85-89 |
Normal alt=
a |
140-159 |
90-99 |
HTA leve
(estadio 1) |
160- 179 |
100-109 |
HTA modera=
da
(estadio 2) |
180-209 |
110-119 |
HTA grave
(estadio 3) |
> =3D 2=
10 |
>=3D 12=
0 |
HTA muy gr=
ave
(estadio 4) |
Fuente: Elaboración
propia.
Esta, según sus características y propós=
itos
clínicos, se clasifica en dos categorías:
Hipertensión arterial primaria o esencial: tiene una prevalencia en más del 95 % de los pacientes, ella puede ocasionarse por la existencia de múltiples mecanismos, como son trastornos del funcionamiento del sistema simpático, resistencia periférica de los vasos sanguíneos aumentada, ineficacia del control metabólico, alteraciones en la función baro-receptora de los vasos sanguíne= os, etc., pero que en la mayoría de los casos no se puede definir o no existe una causa única conocida que produzca= la hipertensión.
Hipertensión arterial secundaria: es causada por trastornos renales o endocrinos específicos,= que aumentan la producción de hormonas como la adrenalina, noradrenalina, renin= a, cortisol, etc. Por su parte las enfermedades vasculares renales producen un aumento de la producción de renina, provocando la conversión de la angioten= sina plasmática, que induce a una vasoconstricción periférica, y la liberación de aldosterona, que estimula la retención de sodio y agua y su disminución o escasez produce insuficiencia cardiaca. (3)
Sea cual sea la causa y categoría de la hipertensión, esta produce procesos patológicos importantes como son la hipertrofia del ventrículo izquierdo del corazón, al aumentar su tamaño (provocando insuficiencia cardiaca), arteriosclerosis, retinopatías y nefropatías. Estas enfermedades y lesiones suelen desarrollarse a lo largo = de muchos años sin que se produzcan eventos mórbidos, lo que hace que a la hipertensión más peligrosa porque en la medida que se produzcan daños mayor= es, más difícil se hace combatir con efectividad los problemas de salud.
Además, se definen varios tipos de hipertensión arterial de acuerdo al comportamien= to de la tensión sistólica y diastólica, como son (5):
Hipertensión arterial aislada: se produce cuando los valores de la tensión arterial se elevan mientras los de la tensión arterial diastólica se mantienen constantes, este tipo de hipertensión arterial se observa principalmente en personas en etap= a de envejecimiento o adultos mayores, producto del aumento progresivo de la resistencia periférica de las paredes arteriales.
Hipertensión arterial diastólica: en este tipo se eleva a tensión arterial diastólica y la sistólica se mantiene normal.
Hipertensión arterial sístole-diastólica: en ella se elevan los valores tanto de la tensión arterial sistólica como de la diastólica.
Varios factores importante= s pueden interactuar con influencias ambientales para producir presión arterial alta esencial, aunque ya planteamos anteriormente que no hay una causa conocida = (4):
·
Anomalías en el sistema nervioso simpátic=
o:
algunas personas con hipertensión esencial pueden heredar las anormalid=
ades
del sistema nervioso simpático, que es la parte del sistema nervioso autóno=
mo que
controla el ritmo cardíaco, la presión arterial y el diámetro de los vasos
sanguíneos.
·
Resistencia a la insulina: =
las
anormalidades metabólicas que causan resistencia a la insulina ocurren en la
mitad de las personas con hipertensión. La resistencia a la insulina ocurre
cuando los niveles de insulina son de normal a alto, pero el cuerpo no puede
emplear la insulina para metabolizar el azúcar sanguíneo en las células
musculares y almacenarla para lograr energía. La resistencia a la insulina =
es
una característica principal en la diabetes tipo II o no dependiente a la
insulina, la que a menudo va acompañada de presión arterial alta. Pero, no
todas las personas con resistencia a la insulina tienen hipertensión, y no
todas las que tienen presión arterial alta tienen este problema, lo que hace
que, aunque exista algún enlace probable, la cadena de eventos que conducen=
a
la presión arterial alta permanece especulativa. También el leptin
o leptina, una sustancia relacionada tanto con la obesidad como con la resi=
stencia
a la insulina, también se encuentra elevada en muchas personas con presión
arterial alta, aunque el papel juega en la presión arterial alta está bajo
investigación.
·
Niveles bajos de óxido nítrico: el óxido nítrico es uno de los factores más importante=
s que
controlan la presión arterial. Si el endotelio no libera suficiente cantida=
d,
los vasos sanguíneos se contraen, lo que incrementa la resistencia en la
circulación periférica y como resultado, se eleva la presión arterial. Se ha
comprobado que los pacientes que sufren hipertensión sistémica (presión
arterial alta), hipertensión pulmonar (presión arterial alta en los pulmone=
s) o
alteraciones en la arteria coronaria, presentan alteraciones en el mecanism=
o de
formación de este gas. (6)
· Niveles elevados del aminoácido homociste= ína: los niveles sanguíneos anormalmente altos del aminoácido homocisteína e= stán altamente vinculados con un mayor riesgo de coronariopatías y accidentes cerebrovasculares. Un estudio reciente ha indicado que los niveles altos de este aminoácido también pueden contribuir a la hipertensión sistólica causa= ndo que las arterias pierdan elasticidad y se tornen rígidas. Se dan niveles excesivos con carencias de las vitaminas B6, B12 y el ácido fólico. Parece = que la homocisteína es tóxica para las células que revisten las arterias y que contribuye a que la sangre se coagule (4).
Se estima que millones de personas sufren de t= ensión arterial alta, cerca del 25% de todos los adultos y que dos tercios de la población mundial experimentará, por lo menos tensión arterial alta leve, a= ntes de la edad de 65 años. Aunque la mayoría tienen hipertensión leve, inclusive esta enfermedad requiere de atención médica y una toma de conciencia en cua= nto a cambiar el estilo de vida y la erradicación de los hábitos nocivos. Sólo = el 20% de adultos tiene la tensión arterial bajo control, cerca de un tercio de los pacientes con tensión arterial alta sufren de sobrepeso (cualquier pers= ona que sufre de sobrepeso corre el riesgo de padecer hipertensión, lo cual es = un 50% más que las personas con peso normal). En efecto, el aumento en la tens= ión arterial a medida que uno envejece puede deberse principalmente al aumento = de peso. Por otra parte se ha comprobado por diferentes investigaciones que los niños y adolescentes que son obesos y los bebés con bajo peso al nacer tien= en un mayor riesgo de padecer tensión arterial alta cuando alcanzan la edad adulta, cuyos datos los consideramos alarmantes teniendo en cuenta las creencias populares que ponen a la obesidad en los niños como muestra de buena salud y la incidencia de nacimientos con bajo peso, producidos generalmente por madres adolescentes o añosas, el hábito de fumar, la drogadicción y el alcoholismo en el embarazo, entre otros agravantes.
Algunos expertos creen que= la hipertensión esencial puede heredarse en un 30% a un 60% de los casos, aunq= ue varios genes, no sólo uno, probablemente están involucrados. Es muy difícil, sin embargo, diferenciar entre las influencias genéticas y ambientales, aún= en los estudios con gemelos idénticos. Los investigadores recientemente han identificado un gen que puede indicar un riesgo mayor de accidente cerebrovascular en algunas personas que tienen tensión arterial alta, lo que puede ayudar a los médicos a determinar tratamientos específicos para estos pacientes.
Cerca del 40% de las perso= nas con tensión arterial alta también tienen niveles de colesterol altos, aunque cualquier relación causal permanece poco clara aún. El estrés puede desempe= ñar un papel en esta asociación; en un estudio las personas con niveles de colesterol altos experimentaron un aumento precipitado de la tensión arteri= al al someterse a una prueba de estrés mental; los que tenían niveles de colesterol normales presentaron sólo un aumento moderado. Cuando el grupo de alto riesgo bajó su ingesta de colesterol, la tensión arterial descendió a niveles normales durante situaciones estresantes. Este resultado debería alentar a los médicos a concebir exámenes de riesgos de cardiopatías ante la presencia de personas con niveles de colesterol particularmente insalubres.=
Varios estudios han vincul= ado la ocurrencia de hipertensión arterial con el estrés crónico, la depresión y la ansiedad, así como la manera de afrontamiento de la realidad con la presión arterial alta, tanto en los hombres como en las mujeres. Las personas que e= stán ansiosas o deprimidas pueden tener dos veces el riesgo de tensión arterial = alta que las que no tienen estos problemas. No está claro si estos trastornos del estado de ánimo contribuyen a la tensión arterial alta, debido a algún efec= to fisiológico en los vasos sanguíneos o si pueden conducir a comportamientos = como aumento de peso o abuso de alcohol, los cuales son también factores de ries= go de hipertensión.
Las personas que experimen= tan apnea del sueño, un trastorno en el cual la respiración se detiene breve reiteradamente durante el sueño, también tiene u= na incidencia mayor de hipertensión. Muchos expertos creen que existe una rela= ción causal entre el trastorno del sueño y la presión arterial alta (4). Tenemos referencias de que la obesidad puede ser un = factor coadyuvante a la ocurrencia de la apnea del sueño que mejora con la pérdida= de peso. (6)
Los cambios en las estacio= nes pueden influir en las variaciones de la tensión arterial, haciendo que aume= nte durante los meses fríos y descienda durante el verano (este efecto estacion= al es particularmente alto entre los fumadores). Mientras el resfrío puede angostar los vasos sanguíneos, otro estudio reveló que la falta de luz esta= ba asociada con una tensión arterial más alta. Un estudio reciente informó que= las personas con tensión arterial normal en descanso, cuya tensión aumenta a niveles anormalmente altos durante ejercicios de máquinas de rueda, pueden correr el riesgo de hipertensión esencial en el futuro. También los anticonceptivos orales, inclusive las dosis bajas, pueden aumentar el riesg= o de presión arterial alta en las mujeres.
Dado que la hipertensión p= uede causar que ciertos órganos se deterioren con el transcurso del tiempo, los pacientes que no la controlan se enfrentan con una expectativa de vida meno= r. La tensión arterial alta contribuye en un 75% a todos los accidentes cerebrovasculares y ataques cardíacos.
Comparadas con los individ= uos normales, las personas hipertensas pueden correr un riesgo hasta diez veces mayor de accidente cerebrovascular y cinco veces mayor de un ataque cardíac= o, según la gravedad de la hipertensión. El riesgo de desarrollar insuficiencia cardiaca congestiva es también significativamente más alto. Las personas cu= ya tensión arterial ha causado hipertrofia ventricular izquierda (engrosamiento de los músculos en el lado izquierdo del corazón que causa aumento de volumen) permanecen a riesgo de accidentes cerebrovasculares, ataques cardíacos, mue= rte repentina e insuficiencia cardiaca incluso después de que la tensión arteri= al está bajo control médico. En los estudios con animales, los investigadores = han encontrado que cuando las células del corazón se agrandan como respuesta a = la tensión arterial alta, experimentan cambios moleculares que causan una secreción anormal de calcio, un mineral crucial para la adecuada contracción del corazón. Este defecto parece ser irreversible, haciendo que la detecció= n y la reducción de la hipertensión, lo antes posible, sea una medida preventiva sumamente importante. La tensión arterial alta causa un 30% de todos los ca= sos de insuficiencia renal que requieren diálisis y operaciones de transplante (esta tasa ocupa el segundo lugar después= de la diabetes).
Alguna forma de disfunción sexual ocurre en un 17% de los hombres hipertensos, producida a menudo por = los medicamentos que se prescriben, pero hay indicios de que el trastorno mismo puede deteriorar la función sexual, aunque la impotencia relacionada con la hipertensión es tratable. Las mujeres con tensión arterial alta, independientemente de los medicamentos, encontraban difícil el lograr satisfacción sexual y sufrían de lubricación vaginal impedida. Unido a esto debemos tener presente el alto nivel de ansiedad, depresión, baja autoestim= a y, el consiguiente estrés que se produce en estos casos.
La tensión arterial alta c= rónica se asocia con el deterioro mental, en especial la memoria y atención a corto plazo. Un estudio ha encontrado que las personas de edad media con tensión arterial sistólica alta corren un riesgo mayor de función mental precaria e= n la en los años siguientes; mientras mayor sea la tensión arterial, mayor es el riesgo. Por otra parte la hipertensión arterial = entre los hombres ancianos también se asocia con un riesgo mayor de demencia y enfermedad de Alzheimer.
Efectos secundarios de los tratamientos de
hipertensión
Uno de los asuntos más dif=
íciles
que los pacientes hipertensos confrontan, en particular aquellos con
hipertensión primaria o esencial, es que el tratamiento puede hacer que se
sientan peor que con los síntomas de la enfermedad, la cual es casi siempre
asintomática. Los pacientes se enfrentan con una perspectiva de toda una vi=
da
para tomar medicamentos con efectos secundarios desagradables, reducir su
ingesta de sal y tener cuidado con su dieta. Muchos de los medicamentos que
tratan la presión arterial alta, por ejemplo, deterioran la función sexual,
aunque esto es reversible de inmediato, una vez que se suspende el medicame=
nto.
Sin embrago, a pesar de los efectos secundarios de los medicamentos, realiz=
ando
un programa de ejercicios dosificados se pueden revertir, en gran medida, l=
as
molestias provocadas por estos. El ejercicio físico provoca cambios a nivel
físico, funcional, psico-social que hacen que estas personas vean la vida d=
esde
puntos de vista diferentes, aumentando su calidad de vida y afrontamiento d=
e la
realidad. Por estudios serios realizados, se ha comprobado que el ejercicio
físico produce estados de pleno bienestar sobre las personas que lo practic=
an de
forma sistemática y dosificada. <=
b>
Si se sospecha la hiperten= sión, el médico deberá obtener la siguiente información:
1.&n=
bsp;
Historia médica familiar y personal, especialmente =
la
incidencia de la tensión arterial alta, accidente cereb=
ro-vascular,
problemas del corazón, enfermedad renal o diabetes, etc.
2.&n=
bsp;
Factores de riesgo de cardiopatía y accidente cerebro-vascular, incluyendo consumo de tabaco, ingest=
a de
sal, obesidad, inactividad física y niveles de colesterol insalubres.
3.&n=
bsp;
Cualquier medicamento (tanto con prescripción y sin
prescripción) que se esté tomando.
4.&n=
bsp;
Una revisión de los síntomas que pueden indicar
hipertensión secundaria, como dolor de cabeza, palpitaciones del corazón,
sudoración excesiva, calambres musculares o debilidad o urinación
excesiva.
5.&n=
bsp;
Cualquier factor emocional o ambiental que pueda
afectar la tensión arterial.
Influencia del ejercicio físico sobre la
hipertensión arterial
La respuesta al ejercicio = físico de la tensión arterial se caracteriza por un aumento casi lineal de la tens= ión arterial sistólica, combinado con una ligera disminución de la tensión arte= rial diastólica y un aumento directamente proporcional con respecto a los valore= s en reposo. Estas respuestas pueden proporcionar criterios válidos para el diagnóstico y tratamiento de la hipertensión arterial.
La prescripción del ejerci= cio es útil en el tratamiento de la hipertensión arterial leve y moderada, particularmente en pacientes jóvenes y de mediana edad, debido a que se han detectado reducciones de hasta 8 a 10 mm Hg. en la tensión arterial sistóli= ca y de hasta 5 a 8 mm Hg. en la diastólica. Hay ciertas evidencias de que un aumento elevado de la tensión arterial durante el ejercicio es una adverten= cia de un mayor riesgo a desarrollar hipertensión arterial, en cuanto a esto se= han establecido las siguientes cifras de respuesta hipertensiva al ejercicio: <= /p>
Respuesta Hipertensiva al esfuerzo: es la respuesta donde la tensión arterial alcanza valores demasiado
elevados, que se clasifican en:
|
|
190 – 210 --- Ligera |
110 – 120 --- Ligera |
220 – 240 --- Moderada |
120 - 130 --- Moderada |
+ 250 --- Severa |
+ 130 --- Severa |
Fuente:
Elaboración propia.
La may= or parte de los programas de ejercicios diseñados y utilizados implican una intensid= ad moderada en los ejercicios, empleando el trote, la caminata o la bicicleta. Parece ser que la intensidad alta no ofrece ventajas en la reducción de la tensión arterial, aunque algunos estudios sugieren el entrenamiento con pes= as como método seguro y ventajoso para pacientes que padecen de hipertensión l= eve y moderada, pues mejoran la fuerza y la potencia muscular de los sujetos y = los prepara de forma integral para su inclusión dentro de la sociedad (3). Actualmente en nuestro país se ha ido ganando conocimiento y se ha ido poni= endo en práctica estos métodos con pesas, utilizando pesos pequeños, por debajo = del 30 % de la fuerza máxima, con resultados muy alentadores.
La capacidad aeróbica=
se
define como la capacidad para realizar un ejercicio dinámico que involucre =
los
principales grupos musculares, de intensidad moderada o alta durante
prolongados períodos de tiempo. La realización de este ejercicio depende del
estado funcional de los sistemas respiratorio, cardiovascular y locomotor. =
Conclusiones
Se considera que la
capacidad aeróbica está relacionada con la salud porque:
· Un nivel bajo de capacidad respiratoria esta relacionado estrechamente con el riesgo de muerte prematura por diferentes causas y, específicamente, por enfermedades cardiovasculares.
· Un nivel alto de capacidad aeróbica está vinculado con la actividad física regular, lo que además la asocia con much= os beneficios para la salud, como son el aumento del consumo máximo de oxígeno= , el gasto cardiaco, disminución de la frecuencia cardiaca en reposo, aumento del volumen sistólico y minuto, la capacidad de trabajo, entre otros parámetros= .
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001.
"Tensión arterial." Enciclopedia® Microsoft®
Encarta 2001. © 1993-2000 Microso=
ft
Corporation.
Artículos de Revisión. Dra Cabrera Rojo. Iliana.
Fisiopatología de la hipertensión
arterial esencial. Hospital Clínico Quirúrgico Docente "General
Calixto García"
PARA
CITAR EL ARTÍCULO INDEXADO.
González Pérez,
E., Fuentes, C. M., & Arias Rodríguez, L. L. (2018). Reflexiones acerca=
prevalencia
de la hipertensión arterial esencial y los efectos del ejercicio físico con
fines profilácticos y terapéuticos. Anatomía Digital, 1(1), 16-27. https://doi.org=
/10.33262/anatomiadigital.v1i1.1038
El artículo que se publica es de
exclusiva responsabilidad de los autores y no necesariamente reflejan el
pensamiento de la Revista Anatomía
Digital.
El artículo qu=
eda
en propiedad de la revista y, por tanto, su publicación parcial y/o total en
otro medio tiene que ser autorizado por el director de la Revista Anatomía Digital.
[1] Ciencias Médicas Mayabeque, =
Departamento
Cultura Física jefe de Departamento, Mayabeque, Cuba, ergonzales@infomed.sl=
d.cu
[2] Ciencias Médicas Mayabeque,
Mayabeque, Cuba, cmfuentes@infomed.sld.cu =
[3]
Ciencias Médicas Mayabe=
que,
Mayabeque, Cuba, llarias@infomed.sld.cu
www.anatomiadigital.org
=
Vol.
1, N°1, p. 16-27, abril-junio, 20